Pastoral
Pastoral escolar
Docentes y catequistas animan, acompañan y dinamizan la dimensión pastoral del colegio. Desde la espiritualidad propia de las Hijas de Jesús, acompañan a toda la comunidad educativa de forma integral, colaborando para que en ella se viva la fe y el sentido de fraternidad y solidaridad.
El Equipo de Pastoral del Colegio está integrado por docentes de los niveles Inicial, Primario y Secundario, quienes trabajan en conjunto con el Equipo Directivo.
Son fiestas señaladas que se celebran con un carácter especialmente cristiano:
Los tiempos litúrgicos: Navidad, Cuaresma, Pascua, Adviento
Las fiestas congregacionales:
27 de abril: Día de la beata María Antonia Bandrés
31 de mayo: Aniversario del nacimiento de Santa Cándida María de Jesús, fundadora de la congregación Hijas de Jesús
9 de agosto: Fiesta de Santa Cándida María de Jesús
8 de diciembre: Día de la Inmaculada
Sacramentos
Los alumnos reciben en el colegio la preparación y catequesis para los sacramentos de Primera Comunión y Confirmación.
Esta formación está a cargo de los catequistas y se busca que forme parte de la educación integral y en clave positiva, propia de nuestro estilo educativo.
Las celebraciones de los sacramentos tienen lugar en el mismo colegio, con sus compañeros, familiares, docentes… y suponen una experiencia importante en sus vidas y para toda la comunidad educativa.
Son de carácter voluntario y son los niños y niñas quienes, en el curso de la preparación y catequesis, deciden con sus familias si desean recibir o no el sacramento.
La Primera Comunión se realiza en 5º grado y la Confirmación en 5º año.
Compromiso social
Toda la comunidad educativa es consciente y sensible a las necesidades de nuestro mundo, de cerca y de lejos. Es por ello muy importante la educación en la dimensión del compromiso social y la solidaridad.
El carisma de la Madre Cándida y, por consiguiente, nuestro estilo educativo, tienen como rasgo fundamental el universalismo que se traduce en una educación para todos sin distinción, y en particular, sin distinción de clases sociales. Sabemos la constante y valiente actitud cristiana de la M. Cándida siempre en favor de los más necesitados. Recordamos su frase con el deseo de hacerla vida también nosotros: “Donde no hay sitio para mis pobres, tampoco hay sitio para mí”. En el Mater se fomenta en todo el compartir y se organizan y favorecen gestos concretos y participación en campañas solidarias.
Espacio de silencio
Ya sabemos lo necesitados que estamos de calma, paz, autoconocimiento, autoestima, saber gestionar las emociones, aprender a vivir plenamente, tener habilidades para vivir el presente con salud física, psíquica y espiritual…
Los adultos con frecuencia decimos que hay aspectos importantes de la vida que “no se enseñan en la escuela”. Desde la clave de educación integral de nuestro proyecto educativo, el colegio da especial relevancia a esta dimensión de la interioridad y ofrece un “Espacio de silencio” guiado que va ayudando a los estudiantes a desarrollar esta dimensión.
Así, cada semana, los alumnos del colegio organizados por grupos pequeños, viven un espacio de silencio dentro del horario escolar en el que, trabajando ejercicios de relajación, consciencia plena, respiración, crecen en el valor del silencio, la paz, el autoconocimiento y la autoestima.
Taller de oración ignaciana
Las Hijas de Jesús es una congregación de espiritualidad ignaciana. Su fundadora, Santa Cándida María de Jesús bebió, vivió y transmitió está espiritualidad.
Son los Ejercicios Espirituales ignacianos (EE) la experiencia que nuclea y fundamenta toda nuestra vida, misión, modo de proceder, proyectos… La persona, al encontrarse consigo misma en su verdad más honda, se encuentra con Dios, busca y halla su voluntad y se atreve y dispone a vivir en verdadera libertad, que le lleva a “ser contemplativo en la acción” y “en todo amar y servir”. Somos seres en proceso y esta “Vida” se va educando poco a poco.
El colegio ofrece una experiencia de acercamiento, conocimiento y vivencia de la oración ignaciana. Conscientes de la riqueza que tiene para nuestra vida y la espiritualidad ignaciana con el carisma de la Madre Cándida, tenemos la certeza de que la experiencia de oración ignaciana les puede ayudar mucho en su crecimiento.